Con el fin de disminuir el impacto de contaminación que generan las colillas de cigarro en el medio ambiente se han buscado diferentes alternativas.
El propósito principal es que estos residuos no afecten el ecosistema, sabemos que tan solo una colilla es capaz de contaminar hasta 50 litros de agua potable y 8 litros de agua de mar, y también que una colilla puede tardar en degradarse de uno a cinco años dependiendo de las condiciones en que se encuentre.
Esto es porque a pesar de su pequeño tamaño, las colillas tienen sustancias perjudiciales para el medio ambiente. Como nicotina, alquitrán, acetato de celulosa e hidrocarburos, así como metales pesados como plomo, arsénico y cianuro. Que, de no disponerse adecuadamente, causan contaminación en el ambiente.
¿QUÉ HACER?
Para empezar, considera reducir el hábito de fumar por tu salud y por el medio ambiente; pero sobretodo, evita tirar las colillas al piso. Es mejor colocarlas en el contenedor especial para estos residuos o en un contenedor de residuos NO reciclables.
Al recolectar las colillas en contenedores ubicados en lugares de mayor consumo de cigarros, como bares, restaurantes, parques, discotecas, universidades, o playas podemos prevenir una mayor contaminación. Sin embargo, ¿qué pasa después?
INICIATIVAS
Aunque se trata de un residuo difícil de reciclar por la cantidad de materiales que lo componen, existen dos iniciativas impulsadas por alumnos de dos instituciones diferentes para aprovechar las colillas y obtener diferentes materiales para fabricar nuevos productos.
El primer proyecto por parte de un alumno de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Iztacala de la UNAM, se trata de obtener celulosa para la elaboración de papel a partir de las colillas de cigarro. Con esta iniciativa que surge a principios de este año, se podría evitar la tala de 14 árboles por cada tonelada procesada.
Y el segundo proyecto fue desarrollado por un alumno de la UVM en Veracruz, el cual se trata de crear productos a partir de un proceso biotecnológico creado por él mismo con el que se manipula el acetato de celulosa (algodón que compone las colillas de cigarro). El alumno afirmó que los productos “quedan limpios del olor a tabaco, así como de riesgo de contraer alguna enfermedad, por lo que es muy seguro de usar”.
Glasdon cuenta con una línea especial de ceniceros adicionados con el sistema SmokeGuard, el cual en caso de que un cigarrillo mal apagado se deposite al interior, se asegura que la mayor parte del humo se quede en el interior.
Ashguard SG
El cenicero Ashguard SG está equipado con el sistema SmokeGuard un ingenioso sistema que evita la salida de humos. En caso de que un cigarrillo mal apagado se deposite al interior, SmokeGuard se asegura que la mayor parte del humo se quede en el interior.
Ashmount SG
El cenicero Ashmount SG está equipado con el sistema SmokeGuard, un ingenioso sistema que evita la salida de humos. En caso de que un cigarrillo mal apagado se deposite, SmokeGuard asegura que la mayor parte del humo se acumule en el interior.
