¿Qué se puede reciclar?

Qué se puede reciclar

Preguntar qué se puede reciclar es una de las cosas más inteligentes que puedes hacer para asegurarte de que estás evitando que una gran cantidad de desechos termine en los vertederos o rellenos sanitarios.

Saber qué se puede reciclar (e igualmente importante, qué no se puede reciclar) es esencial para agilizar las operaciones de las estaciones de transferencia y las plantas de selección de residuos.

Estación de reciclaje
Estación de reciclaje

Existen tres reglas básicas para un correcto reciclaje, conocerlas y ponerlas en práctica te ayudará a reciclar de manera más eficiente.

  1. Recicla todas las botellas, latas y productos de cartón y papel.
  2. Limpia los artículos que vas a reciclar (deja alimentos y líquidos fuera de tu reciclaje).
  3. No mezcles bolsas de plástico con el resto de tus artículos reciclados y no dejes reciclables dentro de bolsas.

Los materiales reciclables dentro de bolsas de plástico corren el riesgo de no pasar nunca por el proceso de reciclaje. Lo correcto es poner los materiales reciclables correctos en el contenedor de reciclaje y los no reciclables en los contenedores de basura. Los reciclables con mayor impacto son las botellas, latas, papel y cartón.

¿Qué se puede reciclar?

botellas de plástico - reciclaje

Plásticos Rígidos/Botellas

  • Cualquier botella o recipiente de plástico que encuentres en tu cocina.
  • Recipientes limpios y secos

Papel y Cartón

  • Cajas de cartón de cereales/snacks
  • Guías telefónicas, revistas y correo.
  • Papel de oficina, periódico y cartón.
cartón - reciclaje

Metales

  • Latas de hojalata, aluminio y acero.
  • Si las latas tienen tapas de plástico o papel, retíralos antes de reciclarlas.

Vidrio

  • Envases o tarros de comida
  • Botellas de refrescos y cerveza
  • Botellas de vino y licor

NOTA: Asegúrate de que los elementos que hayan contenido alimentos u otra sustancia estén completamente vacíos para evitar la contaminación.

Si bien todas las botellas, latas y contenedores deben estar limpios, secos y libres de la mayoría de los desechos de alimentos antes de colocarlos en su contenedor de reciclaje, no es necesario que estén impecables. El objetivo es asegurarse de que estén lo suficientemente limpios para evitar la contaminación de otros materiales.

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